El próximo mes de mayo, como sabéis, hemos invitado a un amplio plantel de expertos de varios países para hablar de un problema común: la despoblación, y cómo el emprendimiento social puede, en la medida de lo posible, al menos frenarla.
Hoy vamos a tirar de números para ver las diferentes (o similares) realidades, desde la Laponia finlandesa a Cuenca, pasando por el Monte Olimpo griego, o el Estado de Brandeburgo o Soria.
Parece lógico que la densidad de población más baja la tenga la Laponia finlandesa. Y, de hecho, es así, con unos muy justos 2 habitantes por kilómetro cuadrado. Pero, ¡oh, sorpresa!, hay otras zonas en las que, aunque sin los rigores climáticos del ártico, apenas viven 2,33 almas por kilómetro cuadrado. Es el caso de la comarca de Tierras Altas, en la provincia de Soria, que además de ser famosa mundialmente por el Paso del Fuego de su capital, San Pedro Manrique, es un auténtico desierto poblacional.
Esas dos zonas son las situaciones más extremas. Pero el resto también registra cifras muy preocupantes. Por ejemplo, las Tierras Altas, en este caso de Escocia, en cuyos paisajes bellísimos solo habitan 8,91 habitantes por kilómetro cuadrado. Un dato que es prácticamente el mismo que el de la provincia de Soria en su conjunto: 8,95 h/km2.
La provincia de Teruel está ligerísimamente más poblada, llegando a los 9,41h/km2. Y la de Cuenca hasta logra ponerse con dos dígitos, con sus 11,89 habitantes por kilómetro cuadrado. Guadalajara alcanza los 21,33 h/km2, mientras que en la región del Monte Olimpo viven 43 h/km2. Finalmente, el Estado de Brandeburgo, una delegación de cuyo Parlamento nos visitará el día 19 de mayo, es el más poblado de todas las zonas que tienen representación en nuestro mitin de mayo, con 74h/km2, que a algunos nos puede parecer un lujazo, pero que empieza a resultar preocupante para los branderburgueses si tenemos en cuenta que la densidad de Alemania es de 231.
En España hay territorios cuya densidad de población es inferior a 1 habitante por kilómetro cuadrado. una situación con datos que desde la Serranía Celtibérica tenemos a disposición.
Las pirámides de edad son también desastrosas ofreciendo una mas que preocupante continuidad al territorio.
En lineas generales Laponia en Europa goza de una excelente salud, por el contrario desde este territorio al que denominamos “Serraná Celtibérica” y que comprende a cinco comunidades autónomas, los ratios de población son escalofriantes, en algunas zonas por debajo de uno.
Las divisiones administrativas, que no las areas territoriales ofrecen una salud diferente a la real (cuando establecemos ratios), y es por esto que construir territorios es cooperar entre ellos para lograr las tan ansiadas e imprescindibles soluciones.
Una situación al que se le tilda con la expresión “Demotanasia”, es decir, la silenciosa y lenta muerte de estos pueblos..
Gracias por vuestro esfuerzo. Desde http://www.celtiberica.es, también nos preocupa y elaboramos proyectos..